Columna: La adición de Trevor Bauer y su gran contrato podría terminar perjudicando a los Dodgers
Agregar al lanzador Trevor Bauer podría llevar a que Justin Turner termine su carrera en otro lugar o que Clayton Kershaw o Corey Seager salgan de los Dodgers después de esta temporada
Adelante, imagine lo que provocará haber agregado a Trevor Bauer a la rotación de los Dodgers. Empiece a hacer planes para octubre. Sueñe con otro campeonato.
Pero debe saber que el asombroso acuerdo podría tener consecuencias no deseadas, como que Justin Turner termine su carrera en otro lugar. O la salida de Clayton Kershaw o Corey Seager después de esta temporada.
El contrato de Bauer de tres años y $102 millones es básicamente un acuerdo de dos años y $85 millones, ya que se espera que el lanzador rechace una opción de jugador de $17 millones para el último año, a menos que tenga un rendimiento inferior o se lesione.
La duración relativamente corta del contrato limita la exposición de los Dodgers, pero solo hasta cierto punto.
Los Dodgers podrían resignarse a pagar recargos por el impuesto de lujo en los próximos dos años. De lo contrario, algo tendrán que ceder. Las implicaciones podrían ser significativas, particularmente en la cultura de la organización.
Los Dodgers solamente acechaban mientras el agente libre Trevor Bauer cortejaba a varios pretendientes. Su paciencia dio sus frutos cuando firmó un contrato de tres años con L.A.
¿Quién hubiera imaginado que después de años de gastos medidos, Andrew Friedman haría una apuesta tan grande por un lanzador como Bauer, con un promedio de carreras ganadas de 3.90?
Los Dodgers ya han superado en decenas de millones de dólares el límite del impuesto de lujo de $210 millones para la próxima temporada. También deberían volver a contratar a Turner, pero eso no significa necesariamente que lo vayan a hacer y esa posibilidad es inquietante.
Se trata de algo más que la vacante que tienen en la tercera base. Turner representa este período del béisbol de los Dodgers tanto como cualquier jugador, y eso incluye a Kershaw. Hay una razón por la que los fanáticos están entrando en pánico por la posibilidad de que pronto pueda estar jugando para otro equipo.
Es el jugador que regresó a su ciudad natal para reiniciar su estancada carrera y convertirse en un All-Star. No solo se reincorporó a la comunidad, sino que se convirtió en uno de sus ciudadanos más prominentes a través de sus esfuerzos caritativos. Su huella en la ciudad es tal que la mayoría de los aficionados le han perdonado su irresponsable decisión de celebrar las Series Mundiales en el campo tras dar positivo por COVID-19. Quieren que se retire aquí, para poder darle la despedida que se merece.
Detrás del simbolismo, tras su icónica barba roja, hay una sustancia real. Turner fue el líder que el equipo no tuvo durante muchos años, una presencia unificadora que era respetada a través de las líneas étnicas y generacionales. Cuando el equipo celebró una reunión en la víspera de su apertura de la postemporada el año pasado, Turner y Mookie Betts fueron los dos jugadores que hablaron.
Turner también era famoso por su fiabilidad cuando los partidos eran más importantes. Es un bateador de .295 en la postemporada. En la Serie Mundial del año pasado, bateó .320 con un par de jonrones.
La casi perfecta temporada del nuevo Dodger Trevor Bauer en Hart High y su éxito en UCLA a través del trabajo duro presagiaron su grandeza en la MLB
El umbral del impuesto de lujo podría ser una consideración de nuevo el próximo año, cuando Kershaw y Seager serán elegibles para probar el mercado abierto.
¿La presencia de Bauer hace que los Dodgers tengan menos probabilidades de volver a firmar a Kershaw? ¿El contrato de Bauer hará posible que le ofrezcan a Seager el tipo de mega negociación que sería necesario para retenerlo si el campocorto tiene otra temporada con calibre de MVP?
Las preguntas son especialmente inquietantes porque los Dodgers no pueden estar seguros de lo que tienen en Bauer.
Ha registrado un ERA de menos de 4.18 solo dos veces en su carrera: En una temporada de 60 juegos el año pasado y en 2018.
También hay preocupación sobre su carácter, ya que ha utilizado su cuenta de Twitter no solo para difundir teorías conspirativas sobre Barack Obama y George Soros, sino también para acosar a las mujeres.
Se trata de una apuesta.
Hace seis años, en su primera temporada baja como presidente de operaciones de béisbol de los Dodgers, Friedman traspasó a Matt Kemp, que en aquel momento era considerado el alma del equipo. Aunque Friedman se arriesgó a alterar la química de un equipo que ganó títulos de división consecutivos, obtuvo flexibilidad financiera al descargar el contrato de Kemp.
Los Dodgers correrán un riesgo similar si no consiguen volver a contratar a Turner. Solo que esta vez, en lugar de ganar libertad económica, podrían verse limitados en lo que pueden hacer.
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