Patricia Campos
columnist
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Pensé en escribir Tierra, Mar y Aire cuando me fui en excedencia como piloto de las Fuerzas Armadas.
Hace un mes que he llegado a Oahu-Hawaii y en estas semanas me he dado cuenta que aquí no se vive el futbol americano con tanta pasión como en el resto de Estados Unidos.
A veces nos sentimos un poco mal y no tenemos ganas de nada.
Mientras en Europa se habla de casos de corrupción y fichajes de futbolistas millonarios, y en Estados Unidos el consumismo de la sociedad año con año rompe récords de compra, en Uganda, en el otro lado del mundo, la gente solo se conforma con ser feliz.
Cuando decidí que iba a ser voluntaria en Uganda, entre otras cosas fue por la situación que viven las mujeres y niñas en este país.
Ya les conté lo difícil y duro que es ser mujer en Uganda, son como ciudadanos de segunda categoría.
Desde que llegó al poder el presidente Yoweri Museveni en 1986 Uganda dejó de tener transporte público.
Todo el mundo ha oído hablar de la ablación genital femenina.
Este post quería dedicarlo a las comidas típicas ugandesas, pero creo que eso se puede encontrar en cualquier guía turística.
La vida de los niños en Uganda es totalmente diferente a la vida de nuestros niños en Estados Unidos y Europa incluso a la nuestra, la de los adultos.
Recuerdo con mucha emoción los dibujos y poemas que mis niños me regalaban cada día.
Yo recuerdo a mi abuelo contándome que cuando iba a la escuela, los frailes les pegaban con una regla en los dedos.