Madres culpan a California por incremento de casos de COVID en las escuelas

Los Angeles —  Para varias madres de familias de las escuelas del sur de California, las autoridades del estado son las culpables por los recientes incrementos de COVID entre los estudiantes.

Una vez que el estado dijo que las escuelas podrían recibir a los estudiantes sin cubrebocas en sus salones, a pesar de que algunos se quejaron, las autoridades de educación siguieron las reglas.

“Es ahora donde estamos viendo que ese levantamiento era prematuro, pero ya lo veíamos venir”, dijo Brenda Camacho, madre con una hija de 8 años en el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD).

“Hay padres preocupados por la salud de sus hijos ahora mas que nunca que muchos menores llegan a las escuelas sin protegerse”, dijo.

De acuerdo con el Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles, se registran 14 escuelas con brotes en un periodo de tan solo una semana. Entre los mas afectados se encuentran unas 12 escuelas primarias y dos escuelas preparatorias.

Las cifras llegan luego de ahora se cree que la subvariante BA.2 es lacepa dominante de COVID-19 que circula en el condado de Los Ángeles, con un aumento en el número de infecciones diarias, aunque las cifras de hospitalización siguen siendo bajas y la tasa de mortalidad sigue disminuyendo.

La semana pasada, BA.2 representó alrededor del 32% de las infecciones en el condado, el doble de la tasa del 16% de la semana anterior.

“Es un suplicio tener que abrir las cartas virtuales de las escuelas o estar en la zozobra de las llamadas para que te digan que tu hijo tiene el virus o estuvo cerca de otro niño contagiado”, dijo Mariela Gonzalez, madre de LAUSD.

“Si vemos que los casos estan incrementando, las escuelas deberían imponer sus propios mandatos de mascarillas para que los niños no se enfermen, y no el gobierno”, dijo Gonzalez.

El aumento de brotes en las escuelas se correlaciona con la propagación de la subvariante BA.2, y le sigue el levantamiento del mandato de mascarillas, dijo la directora de Salud Pública Bárbara Ferrer.

No obstante, Ferrer señaló que la tasa de positividad de las pruebas sigue siendo muy baja en los planteles escolares, por debajo de la tasa de todo el condado. Instó a los campus a seguir de cerca los brotes y tomar medidas como mejorar la ventilación, así como requerir pruebas semanales para estudiantes no vacunados.

Para los padres de familia las recomendaciones no son suficientes.

“Lo que debemos hacer los padres es ir cada uno con nuestros directores escolares y pedir más control en lo que se trata de mascarillasm, porque el levantamiento de mascarillas fue muy prematuro”, dijo Juan Manuel Martínez, padre en el Distrito Escolar Unificado de Montebello.

Ferres dijo por su parte saber que a muchos no les gusta el uso de la mascarilla, pero es un hecho que ayudan.

“A medida que vemos más brotes en las escuelas, tenemos que ver eso y no descartarlo, no decir: ‘No, nunca me volveré a poner esas máscaras’. Vamos a aplicar protecciones cuando sea necesario”.

El fin del mandato del uso de mascarillas en las escuelas se produjo casi exactamente dos años después de que el estado cerrara las escuelas por primera vez en muchos distritos en marzo de 2020. El Departamento de Salud Pública del Condado de Los Ángeles dijo que se alinearía con las reglas estatales después del 11 de marzo.

El mismo 11 de marzo, la presidenta de UTLA, Cecily Myart-Cruz, dijo en un comunicado que era “prematuro discutir la eliminación de estas medidas de salud y seguridad mientras todavía había muchos jóvenes sin vacunar”.