Detienen a un segundo sospechoso en el tiroteo masivo de Sacramento. Encuentran un arma automática en el sitio
SACRAMENTO — Mientras flores y velas llenaban las calles del centro de Sacramento un día después de que un tiroteo masivo cobrara la vida de seis personas e hiriera a otras 12, la policía anunció que había arrestado a un hombre, pero reveló muy poco sobre su identidad y el papel desempeñado en el tiroteo.
Dandre Martin, de 26 años, fue fichado a primera hora del lunes como sospechoso de asalto con arma de fuego y de ser un delincuente en posesión de un arma. La policía dijo que los detectives y los equipos SWAT habían ejecutado órdenes de registro en tres domicilios, pero se mantuvo en secreto sobre dónde y qué habían obtenido.
A primera hora del martes, la policía anunció que había detenido a un segundo sospechoso: el hermano de Martin. En un comunicado, la policía dijo que Smiley Martin, de 27 años, fue uno de los heridos graves en el tiroteo masivo de la madrugada del domingo y permaneció hospitalizado bajo custodia policial.
Será fichado en la cárcel principal del condado de Sacramento por “posesión de un arma de fuego por una persona prohibida y posesión de una ametralladora” tan pronto como sea dado de alta, dijo la policía.
La policía dijo que había recuperado más de 100 casquillos de la calle y de los edificios, muy cerca de una concurrida franja de clubes nocturnos a pocas cuadras del Capitolio estatal, en el peor tiroteo masivo del país este año.
En una inusual declaración el lunes, la fiscal del condado de Sacramento, Anne Marie Schubert, había aclarado que su oficina esperaba “más detenciones en este caso” y subrayó que Dandre Martin “no había sido arrestado por ningún homicidio relacionado con este incidente”. Schubert señaló que la investigación es “muy compleja, con la participación de muchos testigos, vídeos e importantes evidencias físicas”.
En las calles cercanas al crimen, los residentes y trabajadores, algunos desconsolados, pisaban fragmentos de cristales rotos y pasaban por delante de ventanas tapiadas, mientras los familiares de las víctimas -cuyos nombres fueron dados a conocer por el forense del condado de Sacramento el lunes- lidiaban con su dolor.
Las víctimas más jóvenes eran dos mujeres, Johntaya Alexander y Yamile Martínez-Andrade, ambas de 21 años. La mayor, Melinda Davis, de 57 años, era una mujer desamparada muy conocida en la calle K, donde dormía a menudo. Quienes la conocían la describían como “muy simpática” que gustaba mezclarse con los clientes de los bares cuando salían a la hora de cerrar.
Los tres hombres asesinados -Joshua Hoye-Lucchesi, de 32 años; Devazia Turner, de 29; y Sergio Harris, de 38- fueron descritos como padres amorosos.
Líderes de la ciudad de Sacramento y funcionarios electos se reunieron en una plaza del centro el lunes por la noche para una vigilia con velas en honor a las víctimas.
La asistencia fue escasa, pero calle abajo, en el lugar del tiroteo, una reunión informal de familiares se apoderó de la esquina, donde los hijos de Sergio Harris ayudaron a encender docenas de velas en pequeños vasos de papel.
Las autoridades dijeron que siete de las 12 víctimas hospitalizadas habían sido dadas de alta el lunes, mientras que cinco seguían siendo tratadas por heridas de bala.
John Alexander, padre de Johntaya Alexander, dijo que no podía dejar de pensar en la imagen del cuerpo de su hija tendido sin vida en la calle.
Siempre duerme con el teléfono cerca de su cama por si llama una de sus hijas. Así que cuando su teléfono sonó justo después de las 2 de la madrugada del domingo, contestó casi inmediatamente y escuchó el pánico en la voz de su hija Johntezha. Le dijo que estaba sosteniendo a su hermana menor, Johntaya, en sus brazos.
“Papá”, le dijo, “le dispararon a Taya”.
“Estás mintiendo”, dijo él con incredulidad.
Saltó de la cama, se puso la ropa y se dirigió al distrito de bares. Cuando Alexander llegó, vio a alguien intentando reanimar a un hombre que se había desplomado en el suelo.
Entonces sus ojos se dirigieron a su hija. Su hermosa hija de carácter fuerte, cuyo nombre era una combinación del suyo y el de su hermana mayor, cuya energía compartía. Su hija, que adoraba a sus sobrinos y soñaba con convertirse algún día en trabajadora social para poder trabajar con niños.
“Ya se había ido”, dijo Alexander en voz baja. “Sin vida”.
Johntaya, dijo, habría cumplido 22 años el último día del mes.
“Estaba empezando su vida”, dijo, sollozando. “Detengan todos estos tiroteos sin sentido”.
Una amiga de Martínez-Andrade lamentó que su amiga también parecía tener toda la vida por delante.
“A mucha gente le dolió esto, porque ella siempre estaba sonriendo y se llevaba bien con todo el mundo”, dijo Katelynn Sánchez, de 23 años, que conocía a Martínez-Andrade de Selma, un pueblo agrícola cerca de Fresno. “Mucha gente disfrutaba del buen ambiente que hacía. Era una de esas personas que conoces y te caen bien al instante”.
Sánchez dijo que Martínez-Andrade y otra amiga habían ido a Sacramento el sábado por la noche para ver a Tyler, the Creator y Kali Uchis. Sánchez se había quedado en casa porque era el cumpleaños de su hija.
Martínez-Andrade, que trabajaba para la empresa de jardinería de su hermano, estaba dedicada a su familia y “era realmente cariñosa”, dijo Sánchez. “Quería mucho a su madre. Era una hija muy buena”.
“Era muy joven”, añadió Sánchez.
Amigos y familiares de los tres hombres asesinados hablaron de la pérdida que supuso para sus hijos.
“Sus hijos lo eran todo para él”, dijo un amigo de Hoye-Lucchesi. El amigo, que pidió no ser nombrado, dijo que el hombre de 32 años era “muy activo y un muy buen padre”. También era un amigo cariñoso y fiable, añadió, siempre presente en las crisis.
El domingo, un hombre llamado Frank Turner fue fotografiado en el centro de Sacramento siendo rechazado por la policía mientras buscaba a su hijo desaparecido. El lunes, el forense del condado de Sacramento confirmó lo que la familia Turner ya había oído: Devazia Turner fue una de las personas asesinadas a tiros.
La esposa y la hermana de Devazia Turner describieron al joven de 29 años, padre de cuatro hijos, en términos similares: una persona feliz, llena de energía y con un talento para hacer sonreír a los demás.
“Todo el mundo le quería”, dijo Syerra Mathis, su esposa.
Él “sólo quería quererte”, añadió su hermana. “Era simplemente una buena persona. No se merecía esto. No lo merecía”.
Mathis dijo que habló con Turner una hora antes del tiroteo, para saber cuándo volvería a casa.
“Me dijo que me fuera a dormir”, dijo Mathis, rompiendo a llorar. Más tarde recibió una llamada de alguien que estaba con él en ese momento, dándole la noticia.
Fred Harris Jr., de 41 años, describió a su hermano menor, Sergio, como un “tipo bastante bueno y muy querido”, y dijo que, además de sus dos hijas y su hijo, también amaba su coche, los zapatos y beber champán.
“Todo el mundo va a recordar a Sergio”, dijo. “Era simplemente un buen tipo, muy querido en la comunidad. Hacía de todo por todo el mundo”.
La policía de Sacramento subrayó que su investigación está en curso. Los funcionarios se negaron a responder las preguntas sobre si otros responsables del tiroteo siguen en libertad, luego de que el jefe de la policía describió el incidente mortal como la participación de múltiples tiradores.
Los documentos judiciales muestran que el hombre que arrestaron -cuyo nombre también figura como Dandrae Martin en algunos documentos públicos- tiene un amplio historial delictivo.
En 2014, según los registros, fue condenado por un delito menor de violencia doméstica contra un cónyuge o pareja en el condado de Riverside y sentenciado a 30 días de cárcel. Dos años después, fue condenado por intento de agresión con agravantes en el condado de Maricopa y cumplió una temporada en una prisión de Arizona.
Las autoridades buscan en la zona del lugar de un tiroteo masivo con múltiples muertes en Sacramento, California. Domingo, 3 de abril de 2022.
(AP Photo/Rich Pedroncelli)
Mientras la policía seguía procesando las pruebas y los trabajadores intentaban volver a la actividad, a una manzana de distancia los empleados estatales se ponían a trabajar en el Capitolio.
La Asamblea levantó su sesión el lunes en memoria de las víctimas. Y en Washington, el presidente Biden señaló el incidente como un ejemplo de la necesidad de tomar más medidas sobre el control de armas.
“Sabemos que estas vidas no fueron las únicas afectadas por la violencia de las armas anoche”, dijo el presidente en un comunicado. “Y lloramos igualmente por aquellas víctimas y familias que no aparecen en los titulares nacionales.
“Pero debemos hacer algo más que llorar; debemos actuar”.
Garrison informó desde Sacramento y Winton, Mejía y Gerber desde Los Ángeles. Los redactores del Times Anita Chabria en Sacramento y Erika D. Smith en Los Ángeles contribuyeron a este informe.
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